Esta semana hemos asistido al Debate sobre la Orientación Política General de la Junta de Extremadura. Y es exactamente en este debate donde uno puede echar la vista atrás, evaluar qué se ha hecho y analizar la situación actual de la región. Hace tres años abríamos una nueva legislatura a las puertas de una nueva década; se trataba de un gobierno que había construido una Extremadura social habiéndose encontrado una Extremadura vulnerable, limitada y mermada.
Hoy Extremadura se abre ante nosotros como la gran oportunidad que es. Será justicia
Hoy la foto fija de esta región es la de 84.729 parados, solo en este último año 18.084 menos, la tasa más baja de desempleo juvenil desde el 2008, el número de empresas de nuestra región ha seguido subiendo hasta las 33.137, nuestras exportaciones siguen batiendo récords en la serie histórica con un volumen de 2.386,9 millones de euros, han crecido entre el 2016 y el 2021 un 41,3%, registró un superávit del 0,2% en 2021; hoy, Extremadura invierte en sanidad 1.880 euros por persona, y la tasa de abandono escolar ha descendido en 10 puntos en los últimos 7 años en la región, en los que ha pasado del 24 al 14% encabezando el descenso del abandono escolar en España desde que hay registros. Unos datos, los de hoy, que nunca deben parecernos complacientes ni suficientes pero sí muestran una sociedad que ha trabajado en su conjunto para llegar hasta este momento, avanzando, dinámica y comprometida, y esto no ha sido una tarea nada sencilla tras la pandemia mundial y con una guerra invasora a las puertas de Europa.
Atender los problemas actuales de la ciudadanía no puede ni ha podido impedirnos imaginarnos el futuro de nuestra región. La crisis vivida y la puesta en marcha de políticas motoras han acelerado los cambios y podemos afrontarlas desde la vanguardia. Por primera vez, ante crisis mundiales, políticas, estratégicas, sociales y económicas, Extremadura es parte de la solución a través de su apuesta en energías renovables, la logística, la industrialización, el empleo, educación… Saber entender y comprender hacia dónde se dirige el futuro es vital para desarrollar las políticas públicas. Se ha anticipado para traducirlo en mayor desarrollo, estado del bienestar y creación de riqueza a través de una estrategia medida, planificada, con mucho trabajo previo silencioso y constante.
Hoy en Extremadura tenemos estabilidad, somos diálogo, con fortalezas para competir, con una nueva visión adaptada a la nueva sociedad y con el liderazgo necesario, con una juventud con ganas de formarse y repleta de vida, un sector del campo pujante ante los nuevos tiempos y una administración pública robusta y con la aspiración de hacer más fácil, más cómoda la vida cotidiana, leyes que nos agilizan, una región que es un escaparate inconmesurable de cultura y calidad de vida, repleta de energía, convertirnos en la pila verde de Europa…
Hoy Extremadura se abre ante nosotros como la gran oportunidad que es. Está preparada. Será justicia. Es la ambición y el coraje de Extremadura.
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